Mi verano en goleta

Empecemos por el principio ¿Sabes qué es una goleta? Se trata de una embarcación de vela (aunque las de alquiler navegan, generalmente, a motor), hecha de madera, de origen turco y que encontramos en el Mar Mediterráneo, fundamentalmente en Turquía, Croacia, Grecia y, en menor medida, en Italia. Por sus características, resulta un buen barco para el costeo.

Se trata de un barco ancho, con buena capacidad para grupos familiares o de amigos, con camarotes amplios que cuentan con baño privado, amplias zonas de estar y más estabilidad que otras embarcaciones.

Como sabes que en yosilose.com sólo escribimos de lo que hemos vivido en primera persona y nos gusta, ya puedes imaginarte que he tenido la gran suerte de pasar unos días de verano a bordo de una goleta. Y no sólo este verano ¡ya van tres! El primer año navegamos por la costa croata y las Islas Dálmatas, el segundo año lo hicimos por la costa turca y este verano hemos estado por las islas griegas del Dodecaneso.

No soy, en absoluto, una experta en barcos, ni mucho menos. Pero sí que puedo hacerte alguna recomendación o dar algunos consejos prácticos si te planteas pasar unos días a bordo de una… Eso sí, nosotros siempre hemos reservado una goleta para nuestro grupo, no hemos compartido con otros. Y de esta modalidad es de la que voy a hablar aunque es bueno que sepas que existe la posibilidad de reservar únicamente un camarote y compartir el viaje con desconocidos.

Encontrar la goleta perfecta requiere labor de investigación y muuuucha antelación

Esto es un «must». Dependiendo del destino, encontraréis más o menos oferta. En Turquía hay muchas más goletas que en Grecia, por ejemplo. Y puede resultarte complicado encontrar embarcación por la zona que te gustaría recorrer. En muchas ocasiones, la gente se baja del barco habiéndolo apalabrado para el año siguiente.

Hay muchas agencias a través de las que alquilar goletas. No sabría recomendarte alguna en concreto. Basta con teclear en un buscador «alquiler de goletas» para que te aparezcan varias. Echas un vistazo, rellenas cuestionario web con tus necesidades o tus requisitos y los comerciales se ponen en contacto contigo y te llenan el correo con opciones ajustadas a tu petición. Prepárate para recibir fotos e info de la misma goleta por distintos intermediarios. Y es que es un mundo pequeño. Incluso, en alguna ocasión, puedes contactar (tras mucho indagar) con la propiedad del barco. En definitiva, hay que dedicarle un buen tiempo y hacer un «casting» exhaustivo porque hay que fijarse en varios puntos importantes…

El precio es muy variable...

Obviamente. No sólo de goleta a goleta sino, incluso, hablando de una misma goleta, de intermediario a intermediario. Compara e intenta negociar.

Fíjate bien en la capacidad máxima de la goleta.

Las hay de 10/12 personas y hasta goletas de 30. Pero no es únicamente en lo que debes fijarte. Es importante la distribución de las plazas, es decir, la capacidad de los camarotes porque los hay dobles y triples. Y hay que calcular si vuestro grupo encaja en esa disposición.

El puerto desde el que parte la goleta condiciona el recorrido posible.

Ejemplo: si la goleta parte de una isla del Dodecaneso, con ella no es posible recorrer la islas Cícladas. Una goleta se alquila por una semana y, en esa semana, hay una distancia posible de recorrer…

Y aquí metemos una cuña más. El recorrido de la goleta no está necesariamente fijado. Nosotros siempre lo hemos ido fijando día a día en función de las condiciones del mar, el viento… El capitán nos cuenta cada día qué nos recomienda para el día siguiente y nosotros elegimos entre las opciones sensatas que se nos abren. Pasar la mañana en una cala buceando o montando en canoa, hacer alguna excursión por la tarde a algún pueblecito con encanto…

El año de construcción y de renovación son muy importantes.

Un barco con solera y sin renovación no es lo más recomendable… Marca una diferencia importante entre un barco agradable y uno que no lo es.

La disposición de zonas comunes también es un tema interesante para poder convivir cómodamente.

Nosotros nos fijamos especialmente en cómo está dispuesto el espacio para comer, la cubierta dedicada a las hamacas… Y es que en estos sitios es donde se hace grupo. Las grandes mesas de comedor son un lujo para las tertulias, la zona de hamacas es el lugar dónde pasamos más horas y donde más compartimos.

El régimen de comidas también es interesante.

¿Preferís pensión completa o sois más de media pensión? Esta segunda es la ofrecida por defecto. Nosotros preferimos la pensión completa y en ocasiones hay que hablarlo y preguntar el precio. Son varias las razones por las que preferimos esta modalidad. 1) Nos resulta complicado encontrar cena para 20 personas en las pequeñas localidades que visitamos por las tardes; 2) Las cenas a bordo nos permiten no dormir en puerto sino fondeados en calas porque resulta menos caluroso; 3) Probamos más platos de cocina tradicional. Desde luego, siempre hemos tenido una suerte tremenda con los cocineros; 4) Nos facilita dejar más fijado el precio del viaje.

Apunte importante: las bebidas.

En el precio de la manutención va incluido el agua para beber. Cualquier refresco, vino o cerveza debéis encargarlo y pagarlo aparte. Nosotros hacemos cálculos de bebida y lo comentamos con el intermediario que, a su vez, le encarga a la tripulación la compra de las bebidas y nos pasa el precio a pagar. Este encargo requiere un estudio previo sobre vinos de la zona, cervezas, precios… Pero para eso está internet (¡viva!).

Pregunta cuál es el personal con el que cuenta el barco.

Generalmente es capitán, cocinero y un par de personas de tripulación que hacen varios tipos de tareas. Lo recomendamos encarecidamente. Ellos hacen que nuestras vacaciones sea aún más vacaciones. ¡No hacemos ni el huevo!

Entérate de qué accesorios de tiempo libre podréis encontrar en la goleta.

Paddle surf, canoas, esquí acuático, flotador gigante… Solemos pasar gran parte del día fondeados en alguna cala y resulta de lo más ameno poder utilizar una canoa para recorrer algo de la zona o hacer batallas de quien aguanta más en el paddle surf.

Entrarás un sábado a las 15h aproximadamente y saldrás al siguiente sábado a las 9h de la mañana.

Este punto es bien interesante a la hora de encontrar vuelo y organizar viajes accesorios al viaje. Nosotros hemos recorrido Croacia, hemos visto Estambul y visitado Atenas y alrededores antes y después de subir al barco.

Pasarás uno de los veranos de tu vida..

Eso es así. Ver amanecer mientras la goleta navega hacía una nueva cala; bajar en dingui para visitar pequeños pueblos en islas chiquititas; admirar los acantilados, las costas, los litorales; dormir la siesta sobre una tabla de padel surf atada al barco; hacer competición de salto desde cualquiera de las cubiertas o desde los litorales escarpados; charlar, jugar a las cartas, establecer lazos especiales con los jóvenes del pasaje; ver atardecer sobre el mar cada día; admirar los cielos estrellados y hablar de constelaciones después de cenar…

… deseando comenzar la búsqueda de la próxima goleta.