Qué puedes encontrar…

Un bonito restaurante, en la Plaza de Colón, donde el antiguo Riofrío, con dos plantas, un patio espectacular, una decoración exótica y una carta muy entretenida.

Comenzamos por la carta. Existe la inspiración cubana con las croquetas de ropa vieja o los saquitos de arroz a la cubana, por ejemplo, pero también hay mucho mediterráneo. Desde los parppardelle con crema trufada, huevo 64º y crispy bacon al cachopo de ternera blanca de Ávila con pimentos del piquillo y cebolla caramelizada. Pero también hay toques asiáticos con Wok ramen de langostinos, leche de coco, cilantro y fideos de arroz. Entrantes para compartir, pasta, carne y algo de pescado y unos postres que apetecen de principio a fin. una carta muy variada y divertida para que todo el mundo encuentre algo que le apetezca.

Y continuamos con la decoración. Imita a una casa colonial de la Cuba de principios del siglo pasado y es precioso. Desprende un aire nostálgico genial. Luz tenue, muchísimas plantas, suelo de damero, muchas lámparas y sillas con alegres tapizados. Un escenario genial para una buena velada.

Lo mejor…

Sin duda, ese ambiente especial que han sabido crear con la decoración.

Siempre hay una pega…

Para fines de semana hay que reservan con mucha antelación.

Apunte Yosílosé…

Tienen abajo una zona de picoteo también muy agradable y tienen brunch los fines de semana así como un horario súper amplio por lo que, nuestra recomendación es que busques un momento fuera del típico viernes o sábado por la noche para conocerlo. Es un lugar muy agradable.