Qué puedes encontrar…

Una panadería, pastelería y cafetería con aroma francés. Se trata de la primera sucursal española de un maestro panadero y pastelero francés que cuenta con muchas tiendas en todo el mundo y en la que vamos a disfrutar como enanos.

La idea fundamental de este establecimiento es que todo producto sea natural, sin conservantes, y por eso son muchas las veces que se hornea pan y dulces a lo largo del día. Eric Kayser, creador de esta maravilla, ha sido creador también de una máquina mágica que mantiene la masa madre en perfecto estado constantemente para poder hacer pan-pan en cualquier momento. Y ese es su maravilloso secreto.

Muchas variedades de pan para tomar en tostadas en su establecimiento o para llevar a casa. Hay baguettes y hogazas. De trigo sarraceno, de nueces, de cereales, de centeno, de aceitunas, de sésamo… Vale la pena llevarse alguna pieza para casa cuando los visites.

El capítulo dulce es igual de tentador. Cada pieza es diferente a la otra porque todo lo hacen allí mismo (el obrador es abierto y puedes disfrutar con la laboriosidad de los artesanos). Empezamos por los croissants, nada más francés, con ese hojaldre fino y exquisito, con almendras y sin ellas. Un escándalo!. Y continuamos por las palmeras, los brioches, los panes de chocolate, los financier que cuentan con un catálogo bien extenso (de chocolate, de pistacho, de frambuesa). Hay cookies, tartaletas de frutas, eclairs… El dilema está en elegir una cosa o darse el banquete.

Pero su carta no acaba aquí. También elaboran platos salados para darte respuesta a la hora de comer, ricos bocadillos elaborados de su maravilloso pan, ensaladas, pulguitas…

A tanta comida le acompaña un café bien cuidado, procedente de México y tostado por ellos mismos. Smoothies, batidos, frappes… Plan completo.

Puedes disfrutarlo todo allí mismo, en un local bonito, acristalado, con pared de ladrillo visto y un ambiente en el que te invitan a quedarte. O puedes llevartelo a casa porque también son tienda. Incluso cuentan con su propio servicio a domicilio.

Lo mejor…

No es una franquicia. Eso implica que el espíritu de esta panadería ilustrada permanece en la sucursal de Madrid. El buen hacer original de París lo tenemos igualito en Madrid.

Siempre hay una pega…

No nos convence nada su terraza. Es cierto que está dispuesta dónde tiene que estar pero está muy pegada a la calzada y a los coches.

Apunte Yosílosé…

Sitio de merienda sin lugar a duda. Y sitio de desayuno tranquilo de fin de semana con el periódico, de comprar el pan, sitio para llevar un detallito a tu abuela… Nos encanta Maison Kayser.