Qué puedes encontrar…

En pleno campo guipuzcoano, nos encontramos con este precioso palacio del siglo XVII, rehabilitado en 2009 y convertido en un impresionante hotel de 19 habitaciones. Varios tipos para que encuentres la que más se te ajuste. Elegimos la familiar porque es amplia, cuenta con dos habitaciones y un salón comedor.

El hotel mantiene sus arcadas, vigas de madera, forjas y suelos centenarios, que junto a los modernos complementos de tonos suaves le dan un toque muy especial. Además tiene un precioso jardín que merece un paseo.

Cuenta, además, con dos restaurantes. El primero Bailara es un restaurante gastronómico digno de estrella Michelín. El segundo, Bistro IJH es la versión más tradicional.

Lo mejor…

La preciosa y cuidada decoración de la casa y la tranquilidad, ni un ruido.

Siempre hay alguna pega…

Que no puedes estar allí todos los días.

Apunte Yosílosé…

Aprovechar el día para hacer excursiones a San Sebastián, a sólo 30 km, comiendo de pinchos y así conocer bares tan increíbles como: La Espiga, Rojo y Negro e Iturrioz, para volver a cenar al hotel y probar la maravillosa cocina de su restaurante Bailara, que bien merecería una estrella Michelín.

El hotel propone experiencias maravillosas, gastronómicas, catas de vino, spa…