Qué puedes encontrar…
La Vía Verde del Tajuña es un camino asfaltado que discurre junto al río Tajuña y que, con casi 67 kilómetros de precioso paisaje, resulta perfecto para ir en bicicleta o para una buena caminata. Es una ruta asfaltada de color rojo bastante bien mantenida y sin grandes desniveles (salvo entre Morata y Perales, donde hay tramos compartidos con trafico motorizado y pendiente pronunciada en tramos muy puntuales).
La ruta sale de Arganda del Rey en Madrid, a dónde puedes llegar cómodamente en la línea 9 de Metro de Madrid (¡gustazo!) con tu bici siempre que lo hagas en fin de semana o entre semana en horario permitido. Llega a Pozo de Almoguera en Guadalajara y en su recorrido, pasa por Morata de Tajuña, Perales de Tajuña, Carabaña, Orusco, Ambite (Comunidad de Madrid), Mondejar y Yebra (Guadalajara). Puedes empezar en cualquier tramo y hay que tener en cuenta que tienes que volver por el mismo camino porque no es una ruta circular.
Pero para ponernos en situación, vamos con algo de historia primero… Como bien sabrás, las vías verdes son caminos que se han establecido para el ciclismo y el senderismo por el recorrido que llevaban trenes que ya no están en servicio. Esta Vía Verde de Tajuña está ubicada en el recorrido del tren de Arganda (“que pita más que anda”) que estuvo en activo durante todo el siglo XX y que nació con una finalidad agrícola fundamentalmente, con la remolacha y la fruta como principales viajeros.
Es una idea estupenda incluir en esta ruta ciclista (o senderista), una parada en el Museo del Tren de Arganda, en la antigua estación de La Poveda, en el que nos van a hablar algo más de este pasado importante con vehículos y piezas históricas, tanto de esta línea como de otras del resto de España.
Después, el recorrido discurre entre plantaciones, pueblos, campos, cultivos, el río…. Además, la vía verde tiene tramos incluídos en el Camino de Santiago y el Camino de Uclés.
Lo mejor…
Se trata de un recorrido sencillo para toda la familia, que podéis acomodar al tiempo y las fuerzas de las que dispongáis (cuando estéis a mitad de tiempo o de fuerzas, vuelta). Es un recorrido al que se puede llegar en Metro y que está muy cerquita de la ciudad por lo que no requiere de planificación complicada.
Siempre hay una pega…
Que se te pinche la bici. Ojito y lleva el kit necesario ;). Ah! Y agua y algo de comida (hay mesitas por el camino para comer).
Apunte Yosílosé…
Esta ruta puede conectar con otra que se llama Vía Verde del Tren de los 40 días que aún no hemos hecho. La dejamos en la lista de «to do’s». Y echa un vistazo a esta descripción de ruta que te ofrece pormenores aunque, como ya te hemos contado, no tiene pérdida. La hemos encontrado en la web Vías Verdes.
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