Qué puedes encontrar…
El bar de tapas más elegante de la ciudad. Viene de Alicante y ha llegado por la puerta grande a un precioso local al ladito de El Retiro.
Es un local bien pequeño, decorado como un restaurante de comienzos del siglo XX con una barra de madera y zinc, paredes enteladas en flores, cortinas de terciopelo, suelo de teselas y enormes lámparas de cristal. Nos encanta ese aire romántico.
Su carta es deliciosa y perfecta para compartir pequeños bocados gourmet. Está compuesta de productos de primera calidad, todos seleccionados con mimo y muchos de la propia casa. Así, comenzamos con un capítulo de mariscos deliciosos, chacinas para compartir, salazones, conservas… Una buenísima selección de platos de verdura con propuestas tan apetecibles como el tartar de alcachofa con aguacate, manzana y anguila ahumada caramelizada. La ensaladilla Manero, el canelón frío de atún, relleno de tartar de tomate y mahonesa, el bocata de calamares, el bikini de salón y caviar, el lobster roll con cangrejo real y bogavante (se me saltan las lágrimas al recordarlo)… Y postres perfectos para rematar la aventura como la tarta de queso Manero o la torrija con helado de vainilla.
Completamos el plan con una buena carta de cócteles que nos alarga la velada de la forma más divertida.
Lo mejor…
La calidad de sus bocados. Todos son un capricho que no podemos resistir.
Siempre hay una pega…
Es un local muy pequeñito y no tiene terraza. Es súper obligatorio reservar.
Apunte Yosílosé…
Lo vemos perfecto para pequeñas quedadas porque estaréis más cómodos que si vais en grandes grupos.
Tened en cuenta que si os animáis con opciones que incluyan el caviar o el cangrejo real, estáis subiendo la cuenta (pero os lo merecéis, ¿verdad?).
Y si te apetece salir de tapas por Madrid, tenemos el recorrido perfecto.
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